El autoclavable PirlONE consta del cuerpo del tubo, el hombro y la tapa de polipropileno. Todos los componentes se pueden devolver al ciclo de materiales después de su uso. El tubo de un solo material es un sustituto innovador de un tubo de aluminio y también destaca por su altísima reciclabilidad del 96 %.
A pesar del ahorro de materias primas, el tubo laminado ofrece la máxima protección del producto debido al espesor reducido del laminado y también asegura que los alimentos se pueden conservar durante mucho tiempo. Además, el tubo de PP tiene muy buenas propiedades de vaciado residual gracias al grosor de la pared de 250 µm y permanece sin arrugas gracias a la buena resiliencia del polipropileno.
Con el autoclavable PirlONE obtiene una solución de envasado fácil de usar. El PirlONE esterilizable en autoclave no tiene roturas de bordes afilados, el cierre de giro rápido permite a los consumidores abrirlo fácilmente.
¿Tiene preguntas sobre nuestros tubos? ¡Nuestros expertos en embalaje lo asesorarán con mucho gusto!
